La Receta
¿Quién ha dicho que lo excesivamente sencillo no puede ser bueno?
-¡Yo no!
-¿ Y tú?
Porque no es cierto, y si lo pensáis así, ¡leer, leer lo que voy a escribir y os convenceréis!
Mi relato de hoy empieza así y ¡ya!
Tengo que deciros que ayer probé un nuevo restaurante en Palma, nuevo para mí, no es que sea recién abierto, y la verdad es que me quede realmente sorprendida porque nunca me imaginaría que un sitio así se comiera tan bien. El lugar de lo más simple sin ningún tipo de lujos, más bien lo contrario, muy pequeño digamos que caben unas 20 personas y algunas compartiendo mesa, con manteles y sillas como diría mi madre, una de su padre y otra de su madre, forma que se suele utilizar para decir que no había ninguna igual y con un cocinero-propietario de lo más peculiar.
Creo que a veces juzgamos los sitios anticipadamente, (un vicio malo que tenemos para todo, me incluyo en este grupo), y luego nos quedamos alucinados porque la sorpresa es muy grata. El restaurantito por decirlo así se llama FEDELE, como el dueño y su anagrama es similar al de la marca Ferrari de coches, el señor Fedele que así se llama es una persona como he dicho antes refiriéndome al restaurante un tanto peculiar, italiano entradito en años pero que cocina la pasta de una manera increíble, y los demás platos que tomé también son de aprobado con nota alta, una cocina muy sencilla pero muy recomendable. Tomamos unos entrantes de berenjena rebozada con queso por encima tomate y albahaca, que no era la típica a la parmiggiana, acompañadas de unos calabacines rebozados pero ¡dios! Que rebozado mas bueno, era tan crujiente y ligero, algo realmente exquisito.
Mientras esperamos las berenjenas que ya de antemano nos avisaron que tardarían un poco, nos ofrecieron unas gambitas fritas que me recordaron a las mías que hice no hace mucho, pero aquí tengo que decir que se le fue un poco la mano en la sal, pero por lo demás bien , y cuando ya empezábamos a estar bien, aparece un, no sé como decirle, ¿barreño?, enorme lleno de pasta con tomate, albahaca un poco de nata y parmesano, rozaba la perfección, excelente pasta totalmente en su punto y muy bien condimentada con la cantidad de tomate justa para que la pasta simplemente se empapara y no que nadara en ella, en fin, una delicia que pienso volver a repetir y que os recomiendo, el postre no lo tomé porque teníamos prisa, y el precio pues no lo sé porque no pague yo, ¡solo faltaría! Pago mi marido, no dicen que cuando hay un caballero nunca deben pagar las damas, ¡pues!
Es broma, yo no tengo esta mentalidad tan arcaica, ¡solo a veces y cuando interesa! Ja, ja, ja.
El lugar no puede estar más en el centro de Palma, está en plena calle Conquistador justo enfrente del restaurante Parlament, por ello y a pesar de lo simple que es, su clientela es de lo más Vip, ya sabéis, politiqueo que para eso es la zona.
Bien, creo que este señor me tendrá que invitar la próxima vez que vaya por toda la publicidad que le estoy haciendo, yo solo quería poner mi receta de hoy y al final he hecho una campaña promocional a este restaurante.
Mi receta de hoy es una casualidad porque ya la tenía pensada, pero también va de pasta y además muy parecida, unos espaguetis con pesto de albahaca y tomatitos cherry de colores, una autentica monada de colores y buenos, buenos, buenos.
Espero que disfrutéis de esta receta, es fresca y ligera, apta para vegetarianos y para tomar también en frío. Bon frofit!
Pasos
1
Hecho
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ELABORACIÓN DEL PESTOLavar las hojas de albahaca, escurrirlas y trocearlas. Rallar el queso parmesano. Pelar en diente de ajo y trocear. Por último añadir el queso parmesano. Triturar un pelín y ya está. Guardar en tarros. |
2
Hecho
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ELABORACIÓN DE LOS ESPAGUETISCocer la pasta tal y como indica en su envase, dejarla al dente no pasada porque será incomible. Partir en dos los tomatitos. Pelar y laminar los ajos. Mientras tanto en una sartén poner un chorro generoso de aceite de oliva, dejar que se caliente. Primero poner los ajos en la sartén para que se doren lo mínimo, añadir los tomates y saltear sin que se queme el ajo a fuego fuerte, no se deben deshacer los tomatitos. Añadir unos 250 g de pesto o la cantidad que mas os guste, deshacer un poco en el fuego y cuando la pasta esté, introducirla en la sartén, saltearla lo justo para que se mezclen los sabores y los colores. Al final de todo añadir un puñado de albahaca fresca picada no muy pequeña. Servir enseguida con parmesano fresco rallado por encima y espolvorearlos con pimienta recién molida. |
3
Hecho
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ALGUNOS CONSEJOS ÚTILES-la pasta tiene que estar al dente, el éxito del plato depende mucho de la calidad de la pasta. |